ROTTERDAM, ERASMO DE
Desiderio Erasmo, más conocido como Erasmo de Rotterdam, uno de los personajes más influyentes en la Europa de su época, escribió Elogio de la locura en un contexto social y cultural convulsionado por la lucha entre la tradición medieval y las nuevas premisas que apuntaba el humanismo. A lo largo de esta obra que Erasmo dedica a su amigo Tomás Moro, parece querer convencer al mundo de que la Insensatez, la Estulticia o la Locura son el origen de todas las bondades, diversiones y deleites que el ser humano disfruta. Acompañadas de la ebriedad, la adulación, la pereza o la ignorancia, reclama sus méritos con desfachatez y gracia, en un discurso impregnado de ironía. Pero ¿qué pretende Erasmo con este elogio? ¿Qué esconde? ¿En qué consiste este juego de ingenio? ¿Es todo una burla? En Elogio de la locura Erasmo crea un espejismo seductor y contundente que, impregnado del humanismo cristiano que preconizaba, le sirve de excusa para describir la necedad del mundo y arremeter a dentelladas contra todo lo humano y lo divino.